lunes, 19 de septiembre de 2011

BACTERIAS: UN RETO INMUNOLÓGICO.

FIG 1.  Micrófago (Neutrófilo) y macrófago
Hace más de 100 años Elias Metchinikov en su libro  L’immunité dans les Maladies Infectieuses (Inmunidad en Enfermedades Infecciosas) compartió la experiencia adquirida a lo largo de 25 años acerca de la respuesta del huésped frente a agentes infecciosos, enfocándose en lo que llamó inmunidad natural, hoy innata. Su aporte fue valioso si se considera que identificó a los fagocitos como células fundamentales en la defensa del organismo frente a bacterias; aparte de ello diferencio los micrófagos (neutrófilos) de los macrófagos. Cien años mas tarde se identifico el rol de la respuesta inmune innata como gatillo de una respuesta mucho más específica, que se conoce como adaptativa. 
El investigador arriba mencionado debió conocer el hecho de que el los fagocitos tienen la facultad de reconocer "lo propio de lo ajeno";  hecho que se sustenta ampliamente con la evidencia actual de diferentes mecanismos de reconocimiento para diversos agentes bacterianos, como lo son los TLR, que reconocen antígenos particulares y cuya actividad deriva en la generación de una respuesta adaptativa a través de la activación de señales intracelulares que conllevan a la generación de citoquinas proinflamatorias. Estos receptores varían dependiendo el tejido y también cambian en función de la posición que ostentan a nivel celular.  Si bien no son los únicos, de esta cabe mencionar : NOD, Caterpillar Proteins, C1q, Colectinas, Manosse binding Lectin, L ficolina.


En cuanto al antígeno reconocido, es posible señalar algunos ejemplos para enmarcar el reconocimiento: TLR 4, reconoce LPS de bacterias Gram negativas, TLR 5 identifica subunidades de flagelina, componente estructural del flagelo bacteriano, TLR 2 que identifica lipoarabinomanano y lipomanano bacterianio, sin embargo el reconocimiento antigénico de este último extiende a PAMPs  (PATRONES MOLECULARES ASOCIADOS A PATÓGENOS) propios de virus, parásitos, esto sucede también con el TLR4.


La vía de señalización de los TLRs, se encuentra mediada por el receptor intracelular (TIR Domain) que contiene moléculas que facilitan el inicio de la la vía, estas finalmente inducen la expresión de genes vitales en la respuesta inmune a través de la activación de NF - kB  y otros factores de transcripción. 


El sistema inmune esta en la capacidad de mantenernos indemnes frente a una gran cantidad de bacterias (10 000 aprox.), que debido a diversos mecanismos de la inmmunidad innata y adaptativa, no resultan ser patógenas; por otro lado hay al menos 1000 bacterias que establecen relaciones comensales o simbióticas en las diferentes mucosas del organismo; sin embargo hay por lo menos 100 bacterias que resultan patógenas para el humano debido a que poseen diferentes mecanismos de virulencia que les permiten retar al sistema inmunológico. 


Dentro de estas bacterias, la mayoría extracelulares, se encuentran: S. aureus, N meningitidis, H influenzae, S pneumoniae cuyos mecanismos de virulencia les permiten combatir al S.I de manera inteligente, siendo fuertes contendientes. 


Dentro de los Microorganismos intracelulares se puede mencionar a: M. tuberculosis, responsable en el 2004 de 3.9 millones de infecciones activas y de 1.7 millones de muertes en el mismo periodo de tiempo. 


FIG 2: Mo. VS MACRÒFAGO.
En el marco de la infección por este agente, hay que destacar que el macrófago alveolar es la primera célula a la que dicho Mo. se enfrenta. Dependiendo del desenlace de la contienda, pueden suceder tres eventos diferentes: el primero es la muerte celular inducida por el agente patógeno, en el segundo, el macrófago puede ganar la batalla contra el Mo. y finalmente  el Mo. se adapte al ambiente hostil del Macrófago y lo convierta en su nueva morada. 


Para que lo anterior suceda, el agente patógeno cuenta con mecanismos de virulencia bien particulares; dentro de los cuales encontramos: 


1. Inhibición la respuesta al INF gamma por parte de los Macrófagos al hacer regulación a la baja de su receptor, dando como resultado una disminución de la presentación por MHC II. El INF gamma es necesario para el desarrollo de una correcta actividad microbicida por parte de los macrófagos frente al agente.


2. Suppressor of cytokine signaling (SOCS) family: Son moléculas que inhiben la señalización del INF gamma, estas moléculas son potenciadas por el Mo. 


FIG 3: APOPTOSIS - NECROSIS
3. Inducción de apoptosis, necrosis o supervivencia del macrófago, esto en función de la virulencia del agente patógeno. (Factores antiapoptoticos de M. tuberculosis:  NuoG,  SecA, ManLAM  (Ver gráfica.) 


4. Sideróforos (llamados micobactinas) : son moléculas quelantes de hierro, elemento ecencial para el desarrollo de diferentes mecanismos de virulencia. 


Es así que el agente patógeno sobrevive a el macrófago. Sin embargo no es el único Mo. que los posee..... como veremos en la monitoría. 


Cuando el Mo. convierte al macrófago alveolar en su morada, estas viajan hacia el  GL. La infección permanecerá latente bajo el control del SI. No es sino hasta que se produzca un debilitamiento del S.I que se desarrolla la TBC.


Referencias:


1. Natarajan KKundu MSharma PBasu J. .Innate immune responses to M. tuberculosis infection.Tuberculosis (Edinb). 2011 Sep;91(5):427-31.


2.Raupach BKaufmann SHImmune responses to intracellular bacteria  Curr opin immunol. 2001 Aug;13(4):417-28.   
             
3. Tapping RI.Innate immune sensing and activation of cell surface Toll-like receptors.Semin Immunol. 2009 Aug;21(4):175-84. 


4.RICH. R. CLINICAL IMMUNOLOGY, PRINCIPLES AND PRACTICE. Mosby Elsevier. Tercera edición. 2008. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario